VICCU: un vivero que siembra esperanzas en el corazón de la ciudad de Buenos Aires -U.B.A Sustentable 2018

En un mundo que vive una crisis ambiental extrema, los pueblos libres deben ante todo hacer uso de los derechos adquiridos para sortear los desafíos del tiempo. La sustentabilidad como paradigma, representa un poco más que algunas tibias declaraciones de interés. Es un cambio radical en la manera de habitar el planeta.
Ante este desafío inmenso, las universidades deben asumir su rol como actores fundamentales en la vanguardia Eco ética, aplicando la ciencia al servicio de la vida y no ya, al de intereses económicos concentrados. Hoy día la educación ambiental y la ecología han dejado de ser un conocimiento suntuoso para convertirse en una necesidad social. La situación no soporta morales dudosas, economías de saqueo ni envenenamiento masivo de los ecosistemas. El derecho a un ambiente sano (ART 41) deja de ser una suplica para convertirse en rugido. Las culturas americanas aún no han sido vencidas, más bien resurgen cual fénix para dar respuestas ante el rumbo errado de la civilización global.
Frente a la lentitud institucional al respecto, numerosos ciudadanos hemos decidido sumar nuestro pequeño intento, en una experiencia grupal y abierta de participación en el campus de Ciudad Universitaria (U.B.A). Como experimento social y con el objetivo concreto de recuperar el equilibrio medio ambiental del predio, hemos sistematizado la reforestación del área con árboles nativos y con especies medicinales o comestibles. Luego de años de necesitar comprar plantas para este fin nace el Viccu como respuesta natural de autonomía y sostenibilidad. El mismo se consolida como centro de educación ambiental ocupando el vacío existente pero duplicando la apuesta al aplicar la democracia directa como modo de gestión asamblearia y transparente.
Porque entendemos que vivimos en un país agrícola ganadero, buscamos desarrollarnos al máximo como actores para una agricultura regenerativa. Trabajamos para la preservación del patrimonio natural que aún nos queda, y su revalorización como ámbito educativo, de esparcimiento y de debate. Experimentamos en modos y formas de desarrollo que respeten tanto al hogar (oikos) como al ser humano y a la vida en general. Que mejor que un lugar público abandonado para buscar soluciones de fondo?
Muchos somos los que creemos que la Universidad conforma el ámbito ideal para aplicar lo mejor de las capacidades humanas, la técnica, la tecnología y las ciencias al servicio de la sociedad y sus problemáticas…
Ante esto…
los libres del mundo responden, libertad, libertad, libertad…
“No hay un camino para la paz, la paz es el camino”
21 DE MARZO 2018

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